Por: Malka Mekler
Con base a la Ley No.8114, el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (LanammeUCR) elaboró una evaluación anual de las carreteras administrativas bajo la modalidad de concesión de obra pública, con el objetivo de ser un instrumento eficaz e imparcial que colabore a garantizar la calidad y el mantenimiento de los niveles de servicio del patrimonio vial en manos de empresas concesionarias. Dicho informe evalúa la condición actual de la Concesión de Obra Pública Ruta Nacional 27 Carretera San José-Caldera para los años 2019-2020.
Con base a la evaluación realizada, el informe explica que de manera general esta ruta presenta una muy buena capacidad estructural en toda su longitud. Sin embargo, en la condición funcional señalan que sólo un 42% de la longitud del proyecto se encuentra en la categoría “Buena” y el 58% restante se clasifica como “Regular”, lo que representa una disminución de esta última categoría en casi 9% con respecto a la evaluación anterior.
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LanammeUCR recomienda desarrollar intervenciones tempranas del tipo sellos de lechadas asfálticas o similares en las zonas con deterioros de tipo funcional y problemas relacionados con la poca resistencia al deslizamiento, para así contener la propagación de los deterioros detectados y las condiciones de inseguridad vial.
En el caso de la seguridad vial, se hizo la prueba con el medidor de agarre superficial “GripTester” y señaló que un 25% de la longitud en el sentido San José-Caldera y un 17% en el sentido contrario se encuentran en la categoría “Muy Deslizante”. En el sentido San José – Caldera, un 40% se encuentra en la categoría de “Deslizante”.
Para las pruebas de capacidad estructural, funcional y de agarre superficial se valora las Notas de Calidad para esta ruta, así como las estrategias de intervención con base a la nota obtenida en cada tramo. Sin embargo, al comparar los resultados de este año con el anterior se determina una tendencia al deterioro, específicamente al analizar las estrategias de intervención, las cuales en comparación con las obtenidas en evaluaciones anteriores son severas.
En el tema de deterioros superficiales, continúa la tendencia marcada desde la campaña de evaluación 2018-2019 donde se refleja una disminución relativa de los deterioros tipo área y tipo grietas. Para el primer tipo, los deterioros más comunes son la exudación, el bache y piel de lagarto; mientras que en el segundo tipo dominan las grietas longitudinales y transversales. Cabe destacar que el cartel de licitación para este proyecto, se prohíbe del todo la existencia de la exudación, deterioro que ha sido relacionado a nivel mundial con bajos niveles de agarre superficial.
Para las evaluaciones de las radiales el informe recomienda hacer una intervención del tipo Rehabilitación Mayor de manera inmediata en las radiales que presentaron condiciones estructurales críticas, para poder extender su vida de servicio. Además, proponen aplicar un programa de mantenimiento rutinario a cada radial.
Es importante recalcar que el estudio recomienda revalorar el diseño geométrico de la vía, sobretodo ante los planes de la Administración de realizar la ampliación de dicha vía, para que incorporen las condiciones de diseño propuestas en el Manual Centroamericano de Normas y Diseño Geométrico de Carreteras, SIECA (2011).
A lo largo del proyecto se observan diversos obstáculos como luminarias, pilas de puentes, placas metálicas o bases de señales que interrumpen la continuidad de los sistemas de contención. Para esto el estudio propone hacer uso de dispositivos que permitan la incorporación de las luminarias en el sistema de contención de forma segura, o reubicar los elementos.
Para más información sobre la evaluación del Proyecto San José-Caldera Ruta 27 puede visitar la página de LanammeUCR.
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