Copa del Mundo 2026 acelera la modernización de la infraestructura de aeropuertos en México
- Maria Calero
- 23 sept
- 4 Min. de lectura
Esta es una oportunidad para establecer nuevos estándares en la infraestructura aeroportuaria de México. Las mejoras operativas y posibles remodelaciones generarán beneficios duraderos, que posicionarán al país como un referente regional en transporte aéreo y logística de pasajeros.

La cuenta regresiva para la fiesta mundial del futbol que se va a celebrar en nuestro país, no solo se mide en meses y estadios listos, también, en pistas de aterrizaje, salas de espera y espacios aeroportuarios preparados para recibir a cientos de miles de visitantes nacionales y extranjeros. Sin duda, este acontecimiento marcará un punto decisivo para la infraestructura de aeropuertos en México, que deberá atender alrededor de 5 millones de turistas que, según datos de la FIFA, se prevé se movilicen para presenciar los partidos y aprovecharán su estadía para conocer otros destinos del país.
El evento se perfila como un motor para el aumento del tráfico de pasajeros nacionales e internacionales, lo que representa un desafío que va más allá de garantizar la puntualidad de los vuelos. Los aeropuertos deberán responder tanto a la demanda operativa, como a la necesidad de ofrecer experiencias de viaje memorables desde el instante en que el pasajero ingresa a sus instalaciones.
De allí que la construcción y modernización de aeropuertos en México resulta fundamental. Como señala Patxi Borbolla, Director de Proyectos Estratégicos de GAYA: “Un aeropuerto renovado no solo incrementa su capacidad operativa, sino que también proyecta innovación, hospitalidad y profesionalismo, fortaleciendo su identidad de marca y consolidando su papel como auténtica puerta de entrada al país”.
Pero ¿por dónde comenzar o en qué enfocarse? Borbolla subraya que, si bien la modernización de infraestructura de aeropuertos en México debe abarcar estacionamientos, pistas de operación, plataformas de carga y descarga de aeronaves, accesos viales, conexiones intermodales y calles de rodaje, entre otros espacios, las áreas de espera se han convertido hoy en un factor crítico para la satisfacción del pasajero y, por ello, necesitan ser parte de esta renovación.
Un reporte de Airports Council International (ACI) World señala que el confort en las áreas de espera de embarque es clave para la satisfacción general, mientras que el estudio de Collinson mostró que 59% de los viajeros percibe que las salas VIP mejoran significativamente su experiencia, resaltando su impacto positivo en la percepción del aeropuerto.
En la construcción y modernización de aeropuertos en México, “invertir en áreas de espera de calidad trasciende el concepto de lujo; se trata de una decisión que influye directamente en la experiencia del viajero y en la percepción global del aeropuerto”, añade Borbolla. Es fundamental que la industria guie a concesionarios de aeropuertos y a autoridades gubernamentales a enfocar sus inversiones de manera estratégica, en áreas que maximicen el impacto de la satisfacción de los usuarios y les ofrezcan un rápido retorno de inversión.
Para Borbolla, la modernización de las áreas de espera de los aeropuertos no se limita a la estética, sino que debe contemplar múltiples aspectos, desde la funcionalidad y la comodidad de los pasajeros hasta la eficiencia operativa y la integración tecnológica. Para ir más allá a detalle, Borbolla indica algunos de los principales aspectos a considerar:
• Distribución y flujo del espacio. Es fundamental diseñar áreas de espera que permitan circulación fluida, evitando congestión cerca de puertas de embarque. Además, es importante crear espacios diferenciados para descanso, trabajo y socialización.
• Ampliación y rediseño de espacios. Las salas de espera necesitan absorber un mayor número de pasajeros sin comprometer la comodidad. Para ello, se debe incluir mobiliario ergonómico, iluminación adecuada, así como espacios versátiles que puedan adaptarse a distintos flujos de pasajeros durante picos de alta demanda.
• Conectividad y tecnología. Los viajeros actuales dependen de la conectividad digital para mantenerse informados y productivos. Wi-Fi de alta velocidad, estaciones de carga accesibles, pantallas de información en tiempo real y sistemas de autogestión del viaje son elementos que contribuyen a una experiencia más fluida y satisfactoria.
• Soluciones ecosustentables. Las remodelaciones ahora pueden incorporar materiales eco amigables, sistemas de control inteligente de energía y diseño que integra elementos naturales, como jardines interiores o iluminación natural. Estas soluciones reducen la huella ambiental del aeropuerto y contribuyen al bienestar de los pasajeros, creando espacios más confortables, saludables y visualmente atractivos mientras esperan su vuelo.
• Experiencias culturales y gastronómicas. Integrar elementos de la cultura mexicana y opciones gastronómicas locales enriquece la experiencia del pasajero y refuerza la identidad del país. Desde exhibiciones de arte hasta gastronomía regional, estas experiencias convierten al aeropuerto en un espacio memorable, incluso antes de que el visitante llegue a la ciudad.
• Eficiencia operativa y seguridad. La modernización debe garantizar que el incremento de pasajeros no genere congestionamiento ni comprometa la seguridad. Esto requiere optimizar flujos, agilizar procesos de embarque y aplicar soluciones tecnológicas que permitan mantener la operación con estándares elevados, aun en momentos de máxima demanda.
“Cada viaje comienza y termina en un aeropuerto. Invertir en su modernización, a través de un consultor capaz de gestionar sinergias multidisciplinarias y una metodología comprobada, garantiza que los visitantes se lleven una experiencia positiva, vinculando la calidad del viaje con la imagen del país”, finaliza el directivo.



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