El 20% de los accidentes en entornos industriales ocurren por fallas de energía, según la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA).
Por Ana Muradas, Sales &Business Engineer Manager de Quartux
Para todas las industrias una falla en el suministro de energía eléctrica representa pérdidas en las ganancias, sin embargo, en el sector de la salud el impacto no se mide en pesos, sino en vidas humanas, ya que una hora sin luz puede poner en riesgo la vida de hasta 15 pacientes en estado crítico, debido a la interrupción de procedimientos vitalicios.
Este es un tema en el que pocas veces se piensa y al cual debería dársele mayor importancia, en especial hablando de hospitales públicos, ya que no solo se trata de equipo médico que deje de funcionar al momento, un servicio de luz constante es necesario por más cuestiones, mencionemos algunas:
Refrigeración: En la mayoría de clínicas se cuenta con una farmacia abastecida con medicamentos básicos de fácil conservación, sin embargo, en muchas ocasiones se manejan otros suministros como la insulina o ciertas vacunas especializadas, las cuáles no pueden permanecer un largo periodo de tiempo sin refrigeración antes de descomponerse. Otro ejemplo muy importante son las muestras sanguíneas, los órganos, la leche materna y reactivos de laboratorio que no pueden conservarse a temperatura ambiente.
Aparatos médicos: Aquí me parece importante destacar que no solo se trata de equipos de soporte a la vida, como respiradores artificiales o monitores de signos vitales, también se incluyen ecógrafos, tomógrafos, máquinas de rayos X, resonadores, electrocardiógrafos, entre otros. Todos ellos, en correcto funcionamiento, pueden marcar la diferencia durante una emergencia.
Seguridad: Este punto abarca desde el riesgo de una interrupción durante una cirugía, por ejemplo, hasta el llenado de un expediente correctamente. El simple hecho de que sin luz no podemos ver bien afecta en cosas mínimas como poner una inyección, imprimir una receta o en el desplazamiento de personas minusválidas cuando un elevador deja de funcionar por la corriente eléctrica. Basta con recordar que el 20% de los accidentes en entornos industriales ocurren por fallas de energía, según la Administración de Salud y Seguridad Ocupacional (OSHA).
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Nosotros consideramos que todas las instituciones médicas deberían contar con una planta o suministro de energía alterno, con el cual aseguren un abastecimiento continuo ya que no pueden darle el lujo de intermitencias. Nuestros sistemas de control propietario se adaptan de manera inteligente a las necesidades de cada cliente, detectando las horas de mayor consumo y los momentos en que debe liberarse la energía.
Las baterías de ion litio de Quartux almacenan la energía cuando esta es más barata y la utilizan durante los períodos punta que son más costosos, esto reduce hasta un 40% el gasto de luz y vuelve el consumo más eficiente, lo cual beneficiaría mucho a hospitales públicos que cuentan con recursos más limitados y dependen en su totalidad del apoyo gubernamental.
Otro de los beneficios que ofrecemos con esta IA, es mejorar la calidad de la energía y ayudar al cumplimiento del Código de red. Además de brindar un monitoreo en tiempo real que permite adaptar los consumos, junto con los consejos directos de la empresa para un mejor rendimiento.
Como lo mencionaba anteriormente, es muy importante que los hospitales cuenten con respaldos energéticos que los ayuden a prevenir apagones, pues recordemos que según la OSHA, estos pueden incrementar el riesgo de accidentes en 25%. Nosotros ofrecemos beneficios comprobables, pero sin importar quién sea el proveedor de estos servicios, queremos invitar a las instituciones médicas a ser más conscientes de los riesgos que puede haber por una falla de luz, tomar medidas y adoptar las tecnologías necesarias para estar prevenidos.