Hoy en día una ciudad accesible se transforma en aquella que permite que toda la ciudadanía, tenga o no discapacidad, pueda vivir, desplazarse y participar en la vida urbana.
Por esta misma razón estas ciudades le deben garantizar a las personas con discapacidad su acceso libre al entorno, transporte, espacios público y a la información. Entre las formas de manifestarse para crear una ciudad accesible se destaca la construcción de rampas, elevadores, banquetas, letreros o puntos de información, pasos peatonales, semáforos, entre otros.
Se destaca que para hacer una ciudad más accesible no solo se debe pensar en la movilidad, también son importantes la inclusión social y la igualdad de oportunidades tanto físicas como laborales, sociales, culturales o recreativas. En el año 2010 la Comisión Europea comenzó con un pequeño proyecto que busca motivar a diferentes ciudades a convertirse en lo más accesible posible, por esta misma razón califica y otorga un premio a la “Ciudad Accesible” tomando en cuenta los factores ya antes mencionados.
En el 2020 la ciudad que obtuvo este prestigioso premio fue la ciudad de Varsovia, en Polonia, mientras que para el 2021, la ciudad ganadora fue la ciudad de Jönköping, en Suecia, qué transformó constantemente los espacios sociales y laborales para las personas con discapacidades.
El premio se otorga a la ciudad que demuestra una mejora sostenible de la accesibilidad en aspectos fundamentales de la vida urbana y tiene planos concretos para seguir mejorando.
En este concurso participan más de 50 mil ciudades europeas que compiten cada año por el premio que sólo una gana. Sin embargo, también otras han sido reconocidas como “accesibles” por contar con algunas estructuras que facilitan la movilidad universal.