Las municipalidades de Cartago y Poás se aliaron a esta investigación y permitieron el bacheo de algunas zonas que al momento han mostrado estabilidad y durabilidad.
Los estudiantes de Ingeniería Civil de la Universidad Fidélitas, Christopher Alberto Chavez Alvarado y Paul Alejandro Zúñiga Valverde, propusieron un nuevo uso al plástico triturado, agregándolo a la mezcla asfáltica con el fin de mejorar las propiedades del pavimento.
Dicho proyecto nace tras la preocupación de saber que en el país se producen cerca de 564 toneladas a diario de plástico, de las cuales solo el 2,5% son debidamente recicladas, y el 97,5% terminan en vertederos, alcantarillas, ríos y mares. De acuerdo con la ONU, a nivel mundial se producen más de 100 millones de toneladas de plástico, de las cuales, entre el 80% y el 90% termina en los océanos.
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A raíz de esto, con su proyecto universitario denominado “Mezcla Asfáltica Modificada con Residuos Sólidos (Plásticos), en colaboración con la Municipalidad de Poás y la Municipalidad de Cartago” llevaron a cabo las pruebas de asfalto que les permitió corroborar en ambas zonas una mayor estabilidad y durabilidad de la carretera, lo cual se da debido a que el plástico, que dura entre cien y mil años en degradarse, le aporta esos atributos al pavimento.
“El proceso de reciclar el plástico utilizándolo en las construcciones evitará que estos residuos lleguen a las alcantarillas, vertederos, ríos y mares y, con ello, se reducirá el riesgo de las inclementes inundaciones por taponamiento de las alcantarillas y vertederos, la muerte de millones de especies marinas por asfixia o estrangulamiento, el daño a todos los ecosistemas del planeta, etc.”, detalló Cristofer Alberto Chaves.
Por su parte, Paul Alejandro Zúñiga explicó que “en lo que hemos analizado hasta el momento, tenemos claro que se pueden utilizar polímeros, elastómeros, cauchos, y plásticos-según su nomenclatura.” Agregó que “los elementos que encontramos poco factibles para ser incluidos en las construcciones son los pellets y el PVC”.
Con respecto a las pruebas de bacheo, se trabajaron 125 metros en la Municipalidad de Poás donde se utilizó un porcentaje del 0,5% de plástico en la mezcla de asfalto, lo cual representa 100 kilogramos de PET. En el caso de la Municipalidad de Cartago, se abarcó 100 metros a doble carril y se utilizó un 1% de plástico, 400 kilogramos de PET. Lo anterior significa que se utilizó en ambos bacheos 500 kilogramos de PET, lo que representa 16.668 botellas de 600 ml no fueron a los vertederos, sino que fueron reutilizadas.
“Me gusta la ingeniería investigativa e innovadora. Creo que siempre se puede mejorar lo que ya existe, por lo que me pareció interesante investigar sobre este tema que ya se ha puesto en práctica en otros países”, comentó Zúñiga.